Mañana 15 de octubre de 2016 se celebra en todo el mundo el
Día Internacional de las Mujeres Rurales.
Por este motivo, y como todos los años, el Consejo
Provincial de Igualdad entre mujeres y hombres de la Diputación de Granada
ha elaborado un manifiesto para reclamar mayor visibilidad y presencia en
todos los ámbitos y este año, especialmente, incidiendo en la necesidad de
atender las cuestiones de salud y bienestar de las mujeres incorporando la
perspectiva de género.
Os dejamos el texto íntegro y ¡Feliz día de la Mujer Rural!
MANIFIESTO DÍA INTERNACIONAL DE LAS MUJERES RURALES 2016
NO
TE CORTES: ¡CUIDATE!
Con motivo de la celebración
del 15 de octubre, Día Internacional de las Mujeres Rurales, este año las
asociaciones adheridas al Consejo Provincial de Igualdad de la provincia de
Granada queremos aprovechar la ocasión para poner de manifiesto el papel
relevante que las mujeres del territorio rural jugamos de cara al impulso y
desarrollo de nuestros pueblos y, por otra parte, resaltar la importancia de atender
las necesidades e intereses relacionados con la salud y los cuidados de las mujeres
incorporando un enfoque de género.
Colectivamente, las
mujeres rurales somos una fuerza que puede impulsar el progreso, tanto a nivel
local y provincial como nacional y mundial. Somos agentes clave a la hora de
provocar cambios y progresos en nuestro entorno. Pero para ello, entre otras
circunstancias, es fundamental disfrutar de unas condiciones de salud y bienestar
adecuadas que nos permitan afrontar los retos que nos proponemos, así como las
oportunidades que se nos presentan.
Bajo el lema ¡NO TE
CORTES, CUIDATE! queremos poner la mirada en las tendencias que en los últimos
20 años se viene proponiendo desde diferentes organizaciones sociales y
gubernamentales y, sobre todo, en cuestiones que las mismas mujeres llevamos
años proponiendo y que se orientan hacia la búsqueda de nuestro desarrollo
integral.
Esto exige el
replanteamiento del enfoque de la atención en salud y la formulación de propuestas
alternativas que respondan a nuestras necesidades específicas desde una
concepción integral y humana. Es necesario entender que las mujeres, además de
sus necesidades biológicas y psicológicas, tenemos una serie de problemas derivados
de nuestra posición de género en la sociedad. Además, queremos que se destierre
el enfoque de la medicina tradicional centrada en atender las cuestiones de salud
“por partes” incidiendo en los síntomas, y orientar la mirada hacia las causas
y la totalidad del ser humano.
Hablar de salud y
mujeres no es hablar “de nuestras cosas”, o de centrarse solo en “controlar”
procesos biológicos como la maternidad, el embarazo o la menopausia. Trabajar
la salud de las mujeres debe incluir procesos vitales de género, que influyen y
condicionan decisivamente nuestro bienestar y nuestra salud. Teniendo en
cuenta, además, que cada persona, cada mujer, comparte patrones comunes en un determinado
contexto pero, a su vez, cada una somos únicas e irrepetibles.
PARA CONSEGUIR ESTO,
consideramos que la promoción de la salud con enfoque de género debe centrarse
en el empoderamiento de las mujeres. Es necesaria la creación de un entorno que
favorezca la confianza de las mujeres en sí mismas, su autonomía y dignidad,
así como una capacidad de enfrentamiento colectivo para lograr el cambio en lo
personal, con una proyección en lo público y lo social.
El objetivo es que las
desigualdades condicionadas por la invisibilidad, la escasez de servicios y la
inadecuación a las necesidades de salud de las mujeres lleguen a desaparecer.
Las políticas de salud no son suficientes si no hay una transformación de la
realidad de las mujeres que les permita desarrollar plenamente sus derechos e incorporarse
a una acción colectiva, participando activamente en la toma de decisiones
políticas que afectan a cambios ambientales y de los servicios de salud.
POR ESTOS MOTIVOS, y
partiendo del reconocimiento de las desigualdades de las mujeres en materia de
salud que incluyen, entre otras, la invisibilidad de nuestros problemas de
salud, la medicalización de aspectos de nuestra vida cotidiana y la falta de
canales de participación
QUEREMOS HACER UN
LLAMAMIENTO A LAS DIFERENTES ADMINISTRACIONES PÚBLICAS y AGENTES SOCIALES RELACIONADOS
CON ESTE TEMA para que se formulen acciones concretas entre las que destacamos
las siguientes:
·
Concienciación de las mujeres sobre
nuestro derecho a decidir en salud.
·
Participación de las mujeres en la
toma de decisiones sobre las prácticas que son favorables a la salud de la
población general y a nuestra propia.
·
Necesidad de invertir en recursos e
infraestructuras adecuados a las necesidades y percepciones de las mujeres.
·
Necesidad de compartir equitativamente
con los hombres las tareas del cuidado de la salud en la familia.
Así mismo, queremos
incidir en varias ideas que, en ocasiones, están en el imaginario colectivo
cuando hablamos de este tema:
·
Es necesario despojarse de actitudes
paternalistas y desprenderse de estereotipos
·
Es importante estimular a las mujeres
para que definan y persigan sus propios fines
·
Debemos aprender a escuchar y
desarrollar una actitud empática.
·
Es fundamental combatir el sexismo y
la discriminación de ciertos colectivos como las mujeres gitanas, lesbianas o
inmigrantes.
·
Se debe evitar la medicalización de
aspectos cotidianos de la vida de las mujeres.
Y SOBRE TODO, Valorar y
ayudar en la puesta en marcha de las sugerencias de los colectivos de mujeres
relacionadas con la salud.
15 de octubre de 2016
Día Internacional de las
Mujeres Rurales
